DAYTONA BEACH ENTRE LA TRANQUILIDAD Y LA VELOCIDAD

Por Emilio J. Lezcano   carsNtravel.com

Pocos destinos turísticos en la Florida ofrecen al visitante las delicias del mar y también una experiencia inolvidable, sobre todo para los amantes de la velocidad. Daytona Beach es una atractiva ciudad situada en la costa central del Estado de la Florida, a unas tres horas y media por carretera desde de Miami.

Localizada en el Condado de Volusia, estuvo habitada por los indios timucuan, quienes vivían en chozas fortificadas. Por su parte los indios seminola, descendientes de los Creek de Georgia y Alabama frecuentaban esta zona antes de la Segunda Guerra Seminola.

Más tarde, durante la dominación británica (1763-1783) se construyó la Carretera del Rey que comenzaba en San Agustín hasta New Smyrna Beach. Finalmente un hombre de negocios llamado Matthias D. Day fundó la ciudad en 1874 y construyó el hotel “The Palmetto House”. Sin embargo Daytona Beach tuvo que esperar, hasta el año 1876, para obtener su fundación oficial.

Saliendo de la playa, por el International Speedway Boulevad, se llega al famoso Daytona International Speedway. Los atronadores Stock Cars, perteneciente a la Serie NASCAR (National Association Stock Car Auto Racing), usan este óvalo de 2.5 millas para las famosas ‘Daytona 500’, que se celebran todos los años en el mes de febrero, mientras los prototipos deportivos compiten en las ‘24 Horas de Daytona’ que se corren también en el mes de febrero.

Cada año, cuando la bandera verde se agita en el aire, dando inicio a la famosa carrera “Daytona 500”, no se trata de otro capítulo de esta tradicional competencia automovilística, es algo muy importante, la lucha por ganar la Meca de las carreras en el campeonato de la National Association for Stock Car Auto Racing

Cientos de miles de fanáticos llenan cada año las instalaciones del famoso trioval de Daytona Beach para apoyar a sus ídolos, sentados al volante de sus enormes y ruidosos autos “stock” pintados con brillantes colores, que, en realidad, dan la impression de ser enormes vallas anunciadoras moviendose a altas velocidades por este trazado de 2.5 millas.

Por esta pista ha pasado la crema de los corredores de esta especialidad y aun está latente los famosos duelos entre las leyendas como Richard Perry, Bobby Allison, David Pearson y el fallecido Dale Earnhardt, quien sufrió un accidente fatal el 18 de febrero de 2001, precisamente en la última vuelta de las 500 Millas de Daytona, cuando se encontraba en tercer lugar, siguiendo a sus dos autos de equipo, uno guiado por su hijo Dale Jr., quien terminó en segundo lugar y el ganador Michael Waltrip.

Desde 1902 hasta 1935, cuando el piloto británico Sir Malcolm Campbell implantó un record mundial de velocidad con su famoso “Buebird Stramliner”, el 7 de marzo de 1935, todas estas actividades relacionadas con el automovilismo deportivo tratando de romper marcas de velocidad mundiales, estaban concentradas en las arenas de Ormond Beach hasta Daytona Beach.

Desafortunadamente y debido mayormente al crecimiento de la zona, especialmente las arenas compactas de Ormond Beach y Daytona Beach, las marcas de velocidad o los intentos de superarlas se trasladaron a otras arenas, las Salinas de Bonneville, en el estado de Utah.

Sin embargo esta “mudada” no fue el final de la velocidad en la zona. Al año siguiente, en 1936 y hasta 1958, una nueva página en la historia de las competencias automovilísticas para los autos ‘stock’ comenzó a escribirse en la arena de Daytona Beach.

Un mecánico de la zona, llamado Bill France, quien participó como piloto en la carrera inaugural celebrada el 8 de marzo de 1936 y terminó en quinto lugar, se reunió con unos entusiastas del deporte de la velocidad, naciendo en ese mismo momento lo que hoy se conoce como la “National Association for Stock Car Auto Racing” (NASCAR).

Esa reunión tuvo lugar en un hotel de Daytona Beach el 14 de diciembre de 1947 y la primera carrera bajo la organización de NASCAR fue ganada por Red Byron, el 21 de febrero de 1948, mientras que la última competencia en la arena, el triunfador fue Paul Goldsmith en 1958.

Las carreras NASCAR, en esa época, se celebraban en la arena y parte del pavimento de Daytona Beach hasta que un monumental óvalo fue inaugurado al año siguiente, el 22 de febrero de 1959, para la celebración de la carrera “500 Millas de Daytona”.

Mientras un ejercito de furiosos historiadores y románticos del deporte lamentaban la partida de los atronadores autos “Stock” de la dura pero fina y compacta arena de Daytona Beach, una concurrencia de 41,000 personas fueron testigos de otro capitulo  en la historia de la NASCAR.

En esa oportunidad Lee Petty ganó la carrera inaugural derrotando a Johnny Beauchamp. Sin embargo, en esa época no existían los métodos modernos de hoy día, y la llegada a la meta fue tan cerrada, que los oficiales de la carrera tuvieron que trabajar por tres días para llegar a una conclusión con un final de fotografía.

Ganar las 500 Millas de Daytona y su famoso trofeo Harley J. Earl es un momento imborrable para la historia y para el beneficio de los corredores.  Por fortuna y con los nuevos métodos de cronometraje estoy seguro que los fanáticos no tendrán que esperar tres días para saber quien ganó la carrera.
ejlezcano@carsntravel.com

 

 

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Emilio Lezcano

Journalist - Editor - Photographer
Professional Race Car Driver

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