MERIDA, PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

Por Emilio J. Lezcano   carsNtravel.com    Fotos Autor

Desde épocas remotas existe una ruta trazada entre montañas, valles y llanuras que une el norte y el sur de España, y donde floreció la primera gran cultura occidental en la antigua ciudad de Tartessos, a finales de la Edad de Bronce.

Debido a su gran riqueza minera, la zona cercana a la desembocadura del Guadalquivir, donde se erigió Tartessos, adquirió gran significado como proveedora de metales preciosos. Cuando los romanos invadieron la Península Ibérica, en el 218 a.C., otorgaron gran importancia a las rutas necesarias para abarcar la totalidad del territorio, habiendo sido la Vía de la Plata la calzada que enlaza Gijón con Sevilla a través de Cáceres y Mérida.

Esta vía se convirtió en un importante legado histórico-artístico debido al arte y la civilización que se creó a su paso. En sus inmediaciones se fundaron ciudades y se levantaron circos, templos, acueductos, puentes, arcos, hipódromo, calzadas, presas, fortalezas y un sinfín de edificios civiles y religiosos que han sobrevivido siglos después de su construcción.

Fundada en el año 25 a.C., como Emérita Augusta, esta ciudad atravesada por el río Guadiana, sería uno de los dos centros administrativos romanos más importantes del occidente peninsular; condición que no perdería con la llegada de los visigodos en el siglo V, y casi la mantendría con la ocupación árabe dirigida por el yemení Musa ibn Nusayr a partir del siglo VIII. Más tarde, conquistada por las tropas cristianas de Alfonso IX en 1230, se convertiría en sede del Priorato de San Marcos de León de la Orden de Santiago.

Mi recorrido comenzó desde el elegante Parador de Mérida, en el centro de la ciudad, la ex capital de la provincia romana de la Lusitania, inicio del “Iter ab Emérita Asturicam” que, con el paso del tiempo, se conocería como La Vía de la Plata. Actualmente es la capital de la Comunidad Autónoma de Extremadura y declarada por la UNESCO, en 1993, como Patrimonio de la Humanidad y su Conjunto Arqueológico es uno de los mejores conservados de Europa.

Aquí sobresale el Teatro Romano, mandado a construir por Marco Agripa, yerno del emperador Octavio Augusto, que data del año 15 a.C., con una capacidad para unas 6,000 personas divididas en tres tramos que acomodaban a las distintas clases sociales romanas que habitaban en la ciudad . El Teatro Romano, el monumento más emblemático y visitado de la ciudad, se convierte durante los meses de verano en un maravilloso escenario teatral y musical donde se ofrecen conciertos de música clásica y operas.

Muy cerca se visita el Anfiteatro, dedicado a espectáculos con gladiadores. Su inauguración se remonta al año 8 a. C., disponiendo de una capacidad para 14,000 espectadores. A pocos pasos está la Casa del Anfiteatro, restos de una mansión romana de los siglos III y IV. Muy interesante son las dependencias como la zona termal, pozos, hornos, cocinas y restos de la muralla.  Muy cerca se llega a la Casa del Mitreo, antigua residencia de la época romana donde se encuentra el espectacular Mosaico Cosmogónico, y frente a la entrada del teatro y anfiteatro está el grandioso Museo Nacional de Arte Romano.

Desde este lugar, y a pocos minutos, nos encontramos con el Circo o Hipódromo, construido en el siglo I d.C., y que tuvo un aforo de 30,000 espectadores. La “Porta Pompae” daba entrada al cortejo ceremonial y en ella se han encontrado doce caballerizas. Desde aquí se divisan los restos del Acueducto de San Lázaro, construido con el fin de poder salvar las crecidas del río Albarregas.

A escasos metros de este acueducto se encuentra la Basílica de Santa Eulalia, declarada Monumento Nacional, probablemente en ella pudieron enterrarse los restos de la mártir Santa Eulalia, perseguida y martirizada en época de Diocleciano. En el exterior está el famoso ‘hornito’ construido en honor de la mártir, sobre los restos de lo que fuera un templo dedicado al dios Marte.

También a poca distancia se sitúa el popular Acueducto de los Milagros, construido entre el siglo I a.C., y la segunda mitad del III d.C., y sirvió para transporta el agua desde el embalse del lago de Proserpina. Mide unos 830 metros de largo con una altura de 25 metros, y junto a éste se divisa el Puente Romano, sobre el río Albarregas, con una longitud de 145 metros, construido en la época de Augusto. Por aquí pasa la célebre calzada de la Vía de la Plata.

De vuelta a la ciudad, después de unos minutos andando, llegamos a otros monumentos de gran importancia como son el Arco de Trajano, con 15 metros de altura recubierto de mármol, el precioso Templo de Diana, el único de los edificios arquitectónicos religiosos conservado de los que se construyeron en Emerita. De planta rectangular, este edificio religioso destinado al culto del Emperador, y construido a finales del siglo 1 a.C., e inicios de la centuria posterior, está rodeado de columnas de granito acanaladas, que estuvieron pintadas de rojo con pilares de estilo corintio.

Más adelante llegamos al majestuoso Puente Romano, una construcción del año 25 a.C., sobre el río Guadiana. Presenta una longitud de 792 metros y 60 preciosos arcos, uno de los más extensos de la Península Ibérica de esa época romana, y junto a él se puede visitar el Conjunto Arqueológico de Morería, un increíble resumen histórico arqueólogo del lugar.

Siendo emir de Córdoba Abd-al-Rhamán II, se construyó la Alcazaba árabe, probablemente en el año 835, de planta cuadricular, junto al puente romano sobre el río Guadiana. Esta construcción sirvió como un recinto militar para salvaguardar a la ciudad, estableciéndose en ella una guarnición permanente y hoy en día es la sede d la Presidencia de la Junta de Extremadura.

La ciudad romana de Mérida, fundada por el emperador Augusto, fue una de las más importantes del Imperio. La antigua colonia Emérita Augusta, máxima creación estatal de Roma en Hispania y su capital efectiva, ha legado un rico patrimonio artístico y arqueológico, que hace de la capital de la Comunidad Autónoma de Extremadura uno de los sitios preferidos de los turistas locales y extranjeros.

DATOS UTILES

Cómo llegar? Desde Miami FL., Iberia Airlines tiene vuelos diarios hasta Madrid. Desde la capital española a Mérida, por carretera, tres horas.

Dónde hospedarse? Parador de Mérida, Calle Almendralejo No. 56, 06800 Mérida, Badajoz. Teléfono 34 924 31 3800 Website http://www.parador.es/es/paradores/parador-de-merida

Para más información consulte a su agente de viajes.
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Emilio Lezcano

Journalist - Editor - Photographer
Professional Race Car Driver

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